viernes, 25 de noviembre de 2011

Suspendido un desahucio por un defecto formal


Suspendido un desahucio por un defecto formal

EL PAÍS - Bilbao - 25/11/2011

Un juzgado de Getxo ha suspendido por un defecto de forma la subasta del piso de una familia de dicha localidad sobre la que pesaba una ejecución hipotecaria por retrasarse en pagar las cuotas de un préstamo de algo más de 200.000 euros. La afectada, Marta Uriarte, compró en 2007 su casa, que se inundó en las riadas del año siguiente. Poco después dejó de pagar la hipoteca al quedarse en paro y quebrar la empresa de su marido. En abril pasado, BBK instó la ejecución.
Uriarte, portavoz de la Plataforma de Afectados por la Hipoteca de Euskadi, criticó que la caja vizcaína no haya dado "ningún paso atrás" y recalcó que que si el juzgado no hubiese admitido el recurso que presentó su abogada por defecto de forma ayer se hubiese quedado sin su domicilio habitual, según informa Efe.
La letrada, Miren Menchaca, explicó que la semana pasada solicitó la suspensión por un error en los edictos, en relación con la superficie de la vivienda, y por indefensión, ya que el anterior abogado de la afectada "no había querido" defenderla. "Tenemos un plazo para intentar renegociar el asunto con la BBK", añadió.
Menchaca sostuvo que las condiciones de la entidad para renegociar el préstamo "eran imposibles" de asumir, ya que exigía que se aportasen garantías hipotecarias, avales o el pago de 20.000 euros, una cantidad "que Marta en estos momentos no tiene".
[La Policía Local de Vitoria detuvo ayer a un hombre de 58 años acusado de desobediencia y agresión a un agente durante un sorteo de pisos protegidos del Gobierno, informa Karim Asry. El varón se alteró visiblemente tras no lograr que se le adjudicase una de las 170 viviendas que se rifaban. Apoyado en unas muletas, se encaró con los miembros de la mesa del sorteo e increpó a varios de los presentes, a los que acusó de dar pisos a los inmigrantes.
Tras ser instado al orden por los agentes, terminó agrediendo a uno de ellos. El varón fue entonces reducido por varios policías, que tuvieron que tirarle al suelo para esposarle. Tras ser identificado y declarar en comisaría, quedó en libertad a la espera de ser citado por el juez, según fuentes municipales].


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